Ya es Navidad. Las ciudades se visten de luces, el tiempo no enfría el ánimo y la decoración llena casas y calles.
Si estás pensando en vivir unas fiestas diferentes y celebrarlas en otro escenario no te pierdas estas recomendaciones de destinos para disfrutar de la Navidad, ¡hay para todos los gustos!
UN ROADTRIP SACADO DE UN CUENTO: ALSACIA
Si buscas un roadtrip europeo con encanto dirígete a Alsacia y empieza por su capital, Estrasburgo. La conocida como capital de la Navidad, te recibirá con adornos, luces y una capa de blanca nieve.
Si eres un auténtico fan de las fiestas, te volverás a sentir como un niño con los mercados navideños de Estrasburgo y el aroma de los dulces que venden en las casetas.
Desde la ciudad podrás realizar una excursión a Colmar, una localidad que ha quedado detenida en el tiempo entre el Gótico y el Renacimiento y que durante todo el mes de diciembre se convierte en un gran mercadillo navideño al aire libre. Sus casas de madera alsacianas con paredes de colores y los canales que dibuja el río Lauch no te dejarán indiferente. Una parada obligatoria es la Place Rapp Park, donde instalan una pista de hielo, un carrusel y una montaña rusa navideña.
A solo 8 kilómetros de Colmar está tu próxima parada, Eguisheim, conocido por ser uno de los pueblos más bonitos de Francia. Como si de una diana se tratase, sus calles forman círculos concéntricos hasta llegar a la Plaza de la Iglesia.
Si todavía te queda espíritu navideño dirígete a Turckheim para disfrutar de su Calendario de Adviento gigante. Las casas de colores forman este calendario del que cada día se abre una ventana que desvela diferentes escenas navideñas. Esta es sin duda una de las costumbres navideñas más curiosas de Alsacia.
ESPÍRITU NAVIDEÑO SIN SALIR DE ESPAÑA: LA ALBERCA
En el corazón de la Sierra de Francia salamantina encontramos La Alberca. En cuanto pongas un pie en la zona descubrirás el motivo por el que esta localidad está incluida entre los pueblos más bonitos de España.
Sus casas, cruzadas por travesaños de madera y repletas de flores de colores, te transportarán a cuentos tipo “Hansel y Gretel”.
El espíritu navideño se respira en sus calles en las que se juntan el olor a dulces tradicionales como los turrones, perrunillas y obleas con la artesanía local de la zona.
Si decides pasar la noche de Reyes en la localidad podrás disfrutar de un belén viviente que finaliza con la llegada de Sus Majestades de Oriente repartiendo regalos a todos los niños que se encuentren en el pueblo.
LA NAVIDAD MÁS ANTIGUA DE EUROPA: DRESDE
En Alemania encontramos otro de los destinos navideños por excelencia: Dresde. La ciudad alberga uno de los mercados de Navidad más antiguos de Europa.
El mercado Striezelmarkt se celebra desde el año 1434 y pese a todos sus años de historia conserva parte de su esencia original.
Lo encontrarás en la Plaza Altmarkt encabezado por su pirámide escalonada Erzgebirge que protagonizó en 1999 un Guiness World Record gracias a sus casi 15 metros de altura.
La mejor forma de empaparte de la ciudad es pasear sin rumbo, guiándote por las luces y adornos de la ciudad. En tu paseo te encontrarás con hasta once mercados, todos diferentes y todos perfectos para descubrir la gastronomía de la zona y hacerte con objetos decorativos auténticos.
